-Crónica de la vista de Xóchitl Gálvez a Camargo.
La bici por un tractor.
Así, en un tractor verde, llegó Xóchitl Gálvez al lugar de su encuentro con miles de simpatizantes de Camargo y la región.
Con mediana puntualidad, algo usual en las campañas, la candidata del Frente arribó a un caluroso y repleto recinto.
Jorge Aldana, Daniela Alvarez, Tony Meléndez, Mario Vázquez y otros candidatos, fueron recibidos a tamborazos, porras, canciones y gritería por multitudes priístas, panistas y perredistas, esa policromía de colores e ideologías unidas en bloque contra Morena, PT, Verde y los embozados de MC.
Ahí andaban Jesús Valenciano, Miriam Soto, Pepe Moncayo, Pepe Sotelo, Pepe Andujo, Pérez Pavía, Roberto Carreón, Gaby Franco, Jaime Lara, muchos y muchas más.
A la entrada de la ciudad, una larga, desde la caseta de cobro inclusive, notoria presencia militar y policiaca, el helicóptero del Gobierno del Estado. A ambos lados de la carretera de entrada, una muy larga fila de autos, camionetas, tractores, vecinos, curiosos, simpatizante.
En las cercanías y la entrada del gran gimnasio destinado para el acto, las dirigencias partidistas, la militancia, los encargados de la logística como Julio Ibarra, un general vestido de civil, Armando Chavira, Gallo Gallegos.
La algarabía y alegría de un día de fiesta.
En esa impuntualidad campañera de la que hablamos, la espera del inicio del acto la hizo menos aburrida, mucho más entretenida, la voz y el ritmo de Tony Meléndez, quien a petición general se destapó con dos de sus rolas, dándole un descanso a los conductores, que ya ronqueaban.
Luego de los aplausos subieron al tapanco Xóchitl y comitiva, seguida de dos muquiras, quienes le regalaron una blusa de manta estampada y una falda de amplia crinolina.
Meléndez Tony soltó su rollo, Aldana el suyo, Vázquez hizo lo mismo y luego la presidencial se hizo del micro y a sus anchas, sonriente y carismática, hizo suya la ululante audiencia.
El campo abandonado, los programas desaparecidos, la atención sanitaria pública para el arrastre.
Las estancias infantiles y las escuelas de tiempo completo cerradas, la corrupción enquistada en el Palacio Nacional, la violencia sin freno, México en llamas.
El prestigio del país depauperado a nivel mundial, el nepotismo en el cielo, los pillos entre los más pillos viviendo sus mejores días, los feminicidios que no Paran.
Si la súper candidata fue omisa en algo, que la historia se lo demande.
Cerró como debió cerrar el debate. Con propuestas puntuales, precisas, lógicas, plausibles, inteligentes, convincentes.
El cierre, con más de una hora de selfies, de abrazos, de besos.
El final final, el recordatorio de lo que hay que hacer el 2 de junio esperado.