Columna política miércoles 19 de marzo de 2025

En la sala de Cabildo ayer tuvo lugar un acontecimiento singular. Posaron muy hermanables varios miembros de dos grupos panistas locales, a los que el desbocado imaginario político hacía irreconciliables. El único forastero fue el diputado local cuauhtemense Saúl Mireles, pre candidato natural a la Presidencia Municipal, muy cercano al alcalde Valenciano. Los demás, Roberto y Manuel Carreón, Alfonso Rodríguez, Alejandro Badía, Esteban Grajeola, Beto Aragón y Marco Domínguez. Cuando unimos fuerzas, logramos más, fue la frase que posteo Chuy Valenciano junto con la postal. Amor y paz.

La surtieron. Extenso, incisivo, documentado. Así es el reportaje que publicó anoche Carlos Loret de Mola acerca de la super campaña de Andrea Chávez. Sólo en unidades médicas le contabilizó un gasto de 10 millones mensuales. Sin contar carteleras, inmensa inversión en redes y otros contenidos. La doctora Nora Agüeros, a la que identifican como su operadora electoral, ocupa al menos tres minutos de la nota y la señala de ocupar doble plaza federal en el sector salud. En tres minutos la hicieron famosa a nivel nacional. Rematan la nota afirmando que las unidades médicas son de Fernando Padilla Farfán, paisano, amigo y socio de Adán Agusto López, padrino de Andrea. No agréganos más.

La bufalada. Así le decían a las cargadas priístas. Algo así se vio ayer en el PRI municipal durante la inauguración de la oficina de gestión social del diputado Tony Meléndez. Aquí y allá, en cualquier corrillo, el tema era el mismo: era parto del cantante como pre candidato a la Presidencia Municipal de Delicias. Los dirigentes que vinieron de Chihuahua fueron los que encendieron la mecha. Los de aquí, igual que los militantes ahí congregados, encantados.Lo ven con espolones muy filosos. Se cansó de posar, aunque, algo muy raro, no cantó. Fiel a su estilo, fue el último retirarse, detalle que le vale muchos puntos de simpatía. Así la grilla. Obviamente, fue el más aplaudido. El alcalde Valenciano también cosechó palmas, sobre todo al instar al diputado a no rajar ni un pelo en la Cámara de Diputados, donde el oficialismo los trae en carrilla y no les quiere dar ni agua. Fue una audiencia bipartidista, algo ya habitual en estos tiempos aliancistas: Gallo Gallegos, Armando Chavira, Alejandro Badía, Pepe Carreón, Mariano Jáquez, Roberto Carreón, Gaby Franco, Carlos Jaramillo, candidato a Juez de lo Familiar que ya libró la tómbola, Chava Alcántar, y muchos y muchas más.

Se derrumbó la fórmula mágica. De las alturas llegó el flamígero lineazo: salen Mirna Molina y Nacho Flores y entran Juan Carlos Loya y Mirna. Con el pretexto o con el argumento, según quiera verse, de imprimir un toque de juventud, la dupla que compita contra sí misma por la dirigencia del PRI Municipal, será integrada por Juan Carlos y Mirna, con Nacho fuera. El formulismo de la convocatoria será el sábado. La democracia interna, para posterior ocasión. Así lo dijo el maestro Elías Calles, así es acatado diez generaciones después. Se congeló el tiempo.