Suga, o Agust D, se encuentra al centro de la conversación gracias a que su película Suga Agust D Tour D-Day The Movie llegó a la cartelera de prácticamente los cines de todo el mundo. Se trata del último concierto dado por el artista en su gira, justo antes de despedirse de los escenarios, ahora convertida en un evento cinematográfico.
Si bien, el integrante del grupo coreano BTS, por ahora se encuentra cumpliendo con su deber en el servicio militar de su país, su carrera como cantante y el apoyo incondicional de los fans continúa. Razón de que la conversación en torno a su figura sea constante.
En la actualidad, el miembro de BTS, Suga, es reconocido mundialmente por su talento como productor y rapero en la industria del K-Pop. No obstante, antes de alcanzar la fama, tuvo que enfrentarse a numerosos desafíos, entre ellos trabajar en empleos a medio tiempo para poder sustentarse.
Una de las etapas menos conocidas de su vida es cuando Suga trabajó en un restaurante en Los Ángeles, durante la grabación de un reality show con el objetivo de dar a conocer a BTS en la escena musical estadounidense.
Lo sorprendente de esta experiencia laboral fue su papel como lavaplatos, donde además tuvo la oportunidad de compartir con un compañero de origen mexicano.
Este colega, que también buscaba abrirse camino en Estados Unidos, es recordado cariñosamente por los seguidores de Suga, especialmente por una anécdota en la que, al comunicarse en español, el rapero logró entender y responder.
Esta faceta en la cocina, aunque breve, mostró la resiliencia y la disposición de Suga para asumir cualquier tarea necesaria en su camino hacia el éxito. Además de su trabajo en el restaurante, Suga enfrentó otras adversidades, como un accidente de tránsito mientras trabajaba de repartidor, lo que le provocó una lesión de hombro, y la presión de tener que vender sus canciones para subsistir, en un momento en que sus padres habían retirado su apoyo financiero.
