Entre la rica veta de exilados españoles que huyendo de los conflictos en su país o en busca de aventura encontraron nueva patria en México, se cuenta a Clemente Esmeralda, que sería abuelo del ingeniero Pedro Esmeralda García, trazador en jefe de Delicias.
El joven Clemente arribó al nuevo mundo a través del puerto de Veracruz y radicado en San Luis Potosí se casó con María García.
En 1901 les nace Pedro, el primogénito, y al crecer la familia, se mudan a Veracruz, donde éste completa su educación media superior.
Hábil para el dibujo y con facilidad para la topografía, estudia ingeniería en la Ciudad de México y en 1931 se emplea en la Comisión Nacional de Irrigación, entidad oficial encargada de la planeación, trazo y construcción de los Distritos de Riego que demandaba la tecnificación de la agricultura.
Como parte de la CNI, bajo la dirección del ingeniero Carlos Guillermo Blake Arias, es comisionado a la Cruz, Chihuahua, donde se instaló el campamento para la construcción del Canal Principal del Distrito de Riego 05, que haría producir al hectareaje que sería sembrado en la región Centro Sur del Estado.
Al moverse el campamento hacia la estación Las Delicias, y ante la necesidad de construir un asentamiento humano que recibiera a los pioneros que vendrían de tantas partes a poblar aquellas soledades, atraídas por el milagro del agua, tierra buena y en abonos y la expectativa de una mejor vida, el ingeniero Blake se trajo a su gente, entre quienes venía el joven Pedro, que ya tenía fama de trabajador y enérgico, dotes que le valieron el mote de Cabo, por eso, por exigente y mandón.
Llegado el día que se tiró la primera plomada para desmontar y alinear la primera vialidad de la población en embrión, ideada por la creatividad y experiencia de don Carlos, y plasmada por el equipo de dibujantes de la CNI, en la confluencia de lo que hoy es Avenida Agricultura y Calle Central Norte/ Oriente, la superioridad dispuso que Pedro y ocho trabajadores de brazo, ocho brecheros cuyos nombres la historia se tragó, avanzaran haciendo eso, abriendo brecha detrás del polvo que levantaba una pesada máquina que a su lento avance iba abriendo otro mundo.
Con su base nacional laboral en la CNI, Pedro pudo solicitar su cambio a cualquier parte del país, más prefirió quedarse aquí trabajando aquí, tanto de canalero como de topógrafo.
Pendiente de la familia, viendo crecer la población en cuyo trazo contribuyó, gozando del cielo de Delicias como un deliciense más .
Hoy a él , a su memoria, a su familia aquí presente, en ocasión del 91aniversario de la fundación, el Ayuntamiento, la ciudadanía les rinde un tributo sentido, merecido y emotivo, reconociendo su valioso aporte al nacimiento y desarrollo de aquel pueblo que nació para ser grande y ser agradecido con quienes, como la familia Esmeralda, ocupan un lugar especial en las páginas de nuestra historia.
Muy buenos días.
Felicidades a todos.
- Palabras pronunciadas por el Maestro Carlos Gallegos Pérez
Cronista del Municipio de Delicias
Durante el homenaje tributado al señor Pedro Esmeralda García, uno de los trazadores de Delicias.
Abril de 2024.





