Se pasa el alto y atropella a dos jóvenes; sus cuerpos volaron más de 50 metros

La noche del martes 9 de abril, una escena estremecedora quedó registrada por las cámaras de seguridad en la intersección de la Avenida Goiás y la Avenida doctor Augusto de Toledo, en São Caetano do Sul, Brasil.

Dos jóvenes de 18 años murieron de manera instantánea tras ser brutalmente atropelladas por un vehículo que cruzó el semáforo en rojo a gran velocidad.

El reloj marcaba las 22:55 horas cuando un automóvil negro, circulando a exceso de velocidad, irrumpió en el cruce peatonal sin frenar. En ese momento, las dos víctimas caminaban por el paso de cebra con la luz verde para peatones. El impacto fue tan violento que sus cuerpos fueron proyectados a más de 50 metros de distancia, según confirmaron peritos forenses y testigos del lugar.

Las imágenes captadas por la cámara de videovigilancia muestran claramente cómo el vehículo no reduce la marcha y arremete directamente contra las jóvenes. Un segundo después del atropello, los cuerpos desaparecen del cuadro de la cámara, mientras algunos transeúntes y conductores detienen su marcha, conmocionados por lo ocurrido.

De acuerdo con las primeras indagatorias, el conductor, un hombre de 23 años, fue detenido minutos después del incidente. Las autoridades informaron que se encontraba consciente y aparentemente no bajo los efectos del alcohol, aunque aún se esperaban los resultados toxicológicos. Será procesado por homicidio culposo con agravantes, debido al exceso de velocidad y la omisión al semáforo en rojo.

Este trágico suceso ha causado conmoción en todo Brasil. En redes sociales, miles de usuarios compartieron el video del atropello, exigiendo justicia para las jóvenes y mayores controles viales. «No fue un accidente, fue un asesinato al volante», escribió un usuario, mientras otro comentaba: «Pudo haber sido cualquiera. Urge castigar la imprudencia criminal».

Las víctimas, identificadas por sus familiares como amigas de la infancia que regresaban de una clase nocturna, fueron despedidas este jueves en medio de escenas de dolor. “Eran jóvenes, responsables, querían estudiar y salir adelante”, declaró la madre de una de ellas ante medios locales.

El ayuntamiento de São Caetano anunció que revisará la semaforización del cruce y reforzará las campañas de concientización sobre el respeto a las señales de tránsito. Mientras tanto, el país entero sigue conmovido por la violencia de un acto que pudo evitarse con tan solo frenar ante una luz roja.

El caso ha generado una intensa respuesta social y política en Brasil, especialmente por tratarse de un incidente que refleja una problemática creciente en el país: los accidentes viales fatales vinculados a la imprudencia al volante. De acuerdo con el Observatório Nacional de Segurança Viária (ONSV), solo en 2023 Brasil registró más de 33 mil muertes por accidentes de tránsito, siendo una de las principales causas de muerte entre jóvenes de 15 a 29 años.