No hay sequía en Chihuahua, hay saqueo: Andrea Chávez señala a productores como acaparadores del agua

Durante su participación esta mañana en la mesa de análisis de Radio Fórmula, la senadora Andrea Chávez afirmó que Chihuahua enfrenta una crisis hídrica extrema, no solo por la sequía, sino por décadas de desorden legal y acaparamiento del agua.

Explicó que, según el Monitor de Sequía de la CONAGUA, más del 80% de los municipios del estado padecen algún grado de sequía, una condición que afecta con mayor fuerza a los pequeños y medianos productores.

Sin embargo, sostuvo que la problemática no puede atribuirse únicamente a la falta de lluvias o al cambio climático. Aseguró que existe un patrón histórico de concentración de concesiones que ha profundizado la crisis y que, en sus palabras, constituye un verdadero saqueo.

“¿Cómo es posible que una sola familia en Chihuahua concentre 150 títulos de concesión equivalentes a 19 mil albercas olímpicas? Eso no es sequía, eso es abuso, eso es saqueo”, denunció.

Añadió que estas distorsiones se han mantenido “al amparo de la ley vigente y de una ley que aún no existe, pero que estamos obligados a expedir”.

Recordó que actualmente se discute un paquete legislativo que incluye la reforma a la Ley de Aguas Nacionales y la creación de una nueva Ley General de Aguas, reglamentaria del artículo cuarto constitucional, un mandato emitido por la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

Esta nueva legislación, afirmó, busca ordenar el uso, distribución y conservación del agua, impedir el acaparamiento y asegurar que los agricultores y comunidades que realmente producen tengan acceso al recurso, especialmente en estados como Chihuahua.

A partir de este diagnóstico, la senadora arremetió contra legisladores de oposición, acusándolos de emprender una campaña deliberada de desinformación. Señaló que varios de ellos han anunciado su voto en contra del dictamen sin haberlo leído ni entendido su contenido.

“Los opositores no saben ni lo que votan. Se han dedicado a politizar el tema del agua con mentiras y desinformación”, dijo. Subrayó que su deber mínimo como representantes populares es revisar los documentos, informarse y votar con responsabilidad.

“Para eso les pagan, para legislar, para revisar, para informarse y para leer veinte, treinta o cuatrocientas páginas, las que sean. Ese es su trabajo”, insistió.

Cuestionó que, sin conocer el dictamen, algunos legisladores ya recorren medios y redes asegurando que votarán en contra, usando argumentos falsos que generan incertidumbre entre los productores. “Se atreven a opinar sin leer, a desinformar, a mentir. Me da vergüenza”, añadió.

Chávez sostuvo que, a diferencia de quienes buscan politizar la crisis, el dictamen representa una respuesta urgente y responsable para frenar abusos de grandes acaparadores y cumplir con un mandato constitucional pendiente.

Recalcó que la nueva ley permitirá poner orden, combatir privilegios y proteger a quienes trabajan la tierra y sostienen la economía regional.

Finalmente, envió un mensaje directo a la oposición: “Si quieren de verdad ayudar en el tema del agua, primero lean el dictamen. Aquí vamos a seguir desenmascarándolos”.

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